¿Quieres casarte conmigo? Es una pregunta con las que muchas soñamos y otras sienten pavor. Actualmente existen cantidad de opiniones a favor y en contra del matrimonio y muchas parejas deciden vivir juntos sin necesidad de contraer un vínculo matrimonial, decisión que respeto totalmente. Pero sinceramente me declaro partidaria del matrimonio y creo en él como un acto sagrado que une a dos personas y afianza el compromiso de amarse y formar una familia bajo la bendición de Dios. Hace 7 meses dí el sí al hombre que amo, completamente segura de querer pasar mi vida a su lado y antes de que esto sucediera recibí miles de opiniones al respecto: “no te cases aun”, “eres muy joven”, etc. y fueron muy pocas las personas que me contaron buenas experiencias del matrimonio. Sea como sea, la decisión de casarse o no depende solo de la pareja y nada más. Ahora que ya soy una mujer casada y a pesar de tener poco tiempo de serlo, defiendo con muchas más ganas el matrimonio y lo recomiendo siempre. No niego que a veces me dan ganas de matar a mí esposo, no literalmente claro está, pero en esta corta experiencia he ido notando muchos beneficios del matrimonio que hoy quiero compartir con ustedes:
· Según la OMG (Organización Mundial de la Salud), el matrimonio reduce la depresión, la ansiedad y el suicidio y permite vivir más y como no, si estas compartiendo tu vida con la persona que amas!
· Es tan bonito despertar y tener a quien mirar, a quien darle el besito de buenos días, quien te abrace si hace frio o quien te desvista si hace calor, no les parece bueno?
· Los planes a futuro son más fáciles de lograr, ya no eres tu sola quien lucha por conseguirlos, ahora tienes otra persona que te ayudará y si no se consiguen te consolará.
· Si estas aburrida y no tienes que hacer, tienes a quien atacar a cosquillas, jalarle las orejas, molestar un rato, es muy divertido, aunque no tanto para él.
· Y qué decir de esos días de lluvia y pereza, en los que no quieres salir de casa y te dan algunos antojitos: pizza de pimentón, chocolate, malteada de fresa, mmm que rico, pues quien va a comprarlo? Si, tu esposito lindo.
· Tu esposo puede ser también tu amigo, con el puedes conversar, llorar, pelear, reír y el siempre te escuchará.
· Aprendes cosas nuevas. En mi caso no soy muy buena cocinera y el sí lo es, por lo tanto es mi profesor personal.
· Y el aprende a ser menos basto. Te imaginas a un hombre de 1.80 haciéndole cosquilla a una mujer de 1.60????
· Tienes tu propio guía turístico ya que cuando llegan los fines de semana tienes quien te arma el plan, a donde ir, que comer…y lo mejor es que el paga!
· Si algún día enfermas él es quien te cuidará, te consentirá, te dará tus medicinas y hasta caldito preparará.
· Si no quieres más de lo que estas comiendo, no te preocupes, ahí está tu esposito que se termina comiendo lo que no te pasa y así no engordas.
· Y hablando de engordar, a él no le importa si subes unos kilitos de más, aun así te ve linda. Pero ojo, no engordes mucho!.
· Tu amor por la familia se incrementa. Amas a su familia por traerlo al mundo y el ama la tuya igual.
· Y ni hablar de los hijos, aunque aún no han llegado a este matrimonio, se que son una gran bendición en la vida de pareja. Cambias el mundo solo para que ellos sean felices.
· Adquieres más paciencia ya que son inevitables los pequeños roces, que la ropa desordenada, que no bajó la tapa del inodoro, que quiere ver el futbol y tú la telenovela, pero el amor todo lo puede y también puede con estos pequeños detalles.
· Te conviertes en su heroína. Es maravilloso ver la cara que hace cuando le arreglas un pantalón roto.
En fin, estar casada tiene muchos beneficios y aunque no todo puede ser color de rosa, porque siempre habrá dificultades, no cambio por nada la felicidad que siento al despertar y verlo dormir a mi lado. Es una bendición.
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